El mundo está
lleno de misterios que nunca comprenderemos pero que son irresistibles. Desde
los gigantes de piedra de Isla de Pascua al territorio del misterioso Yeti o a
las líneas de Nazca, este es un viaje por algunos de los lugares más
indescifrables del planeta, entre posibles extraterrestres y enigmáticas
civilizaciones del pasado.
1 Las huellas del Yeti
En cualquier parte del mundo
podemos encontrar historias sobre una criatura parecida a un gran simio humano.
Concretamente la leyenda del Yeti procede del Himalaya y llegó a Occidente a
principios del siglo XX. El máximo interés se despertó en la década de 1950, a
medida que se conquistaban las montañas del Himalaya. Las fotografías de unas
supuestas huellas tomadas por Eric Shipton en 1951 avivaron el interés, y
Edmund Hillary y Tenzing Norgay también aseguraron haber encontrado unas
huellas de gran tamaño en su ascensión al Everest en 1953.
2 Los guardianes gigantes del Pacífico
Para ser un
islote (o casi) situado en medio de un gran océano, la isla de Pascua ha
causado una gran impresión en la psicología viajera. Las imágenes de sus moáis de
piedra son famosas en todo el mundo, pero lo que aún no se sabe es cómo y por
qué se alzan en su costa. Si la tarea de transportar estas cabezas de 85
toneladas (cada una) desde la cantera de Rano Raraku, en el interior de la
isla, donde se tallaron, intimida incluso hoy, podemos imaginar lo que suponía
en siglos anteriores. La pregunta es siempre la misma: ¿Cómo se las arreglaron
los habitantes de una de las comunidades más aisladas del mundo para levantar
semejantes moles de piedra? Sigue siendo un misterio.
3 ¿Campesinos extraterrestes?
Los llamados “crop
circles” o círculos en las cosechas son uno de los fenómenos más extraños del
planeta. Hayan sido creados por lugareños, por fenómenos climáticos o por
extraterrestres de mentes geométricas, estos círculos resultan intrigantes
desde que comenzaron a aparecer a finales de la década de 1970. Estos
“patrones” tienen su hogar espiritual en la población de Avebury (Wiltshire),
que casualmente también es famosa por sus círculos de piedras de más de 5000
años de antigüedad, declarados Patrimonio de la Humanidad e igualmente
misteriosos, que se atribuyen a los druidas. Por su enorme tamaño, se cree que
era el lugar sagrado más importante de toda gran Bretaña o tal vez de todo el
continente.
4 La Atlántida japonesa
La isla
habitada más occidental de Japón entró en el mapa de los misterios a mediados
de la década de 1980, cuando unos buceadores descubrieron una especie de ruinas
submarinas, con rocas que mostraban superficies lisas, líneas y ángulos rectos.
La conclusión fue que eran obra del ser humano: la Atlántida japonesa. Hoy, el
debate continúa sobre si las rocas forman parte de una estructura humana
antigua o se trata de una formación natural “tipo Lego”. Sea como fuere,
Yonaguni se ha convertido en uno de los mejores destinos submarinistas de
Japón.
5 Misterios
solo a vista de pájaro
Es la clase de
yacimiento arqueológico que nadie podría inventar. Colibríes, monos, arañas y
otras figuras gigantes, todo grabado hace 2000 años en el desierto peruano.
Pero lo más misterioso es que no pueden verse desde el suelo. ¿Obra de
extraterrestres? ¿Trazos de aeronautas prehistóricos? ¿Un inmenso mapa astronómico?
Ninguna explicación sobre estos gigantescos petroglifos del sur de Perú
coincide. Su misterio ha atraído a visitantes desde la década de 1940, cuando
la arqueóloga alemana María Reiche comenzó a estudiarlas. Dedicó a ello la
mitad de su vida, pero ni Reiche ni ningún arqueólogo posterior ha conseguido
descifrar este conjunto de 800 geoglifos, formas, líneas rectas y dibujos en la
llanura.
A nivel del
suelo, la zona tiene el aspecto de un tramo anodino de tierra rojiza. Pero,
cuando una avioneta alza el vuelo, las enormes figuras de una ballena, un
cóndor y un pelícano se despliegan ante los ojos de los pasajeros. Hay varios
museos en Nazca que intentan ofrecer alguna luz sobre el tema (Museo María
Reiche, Planetario María Reiche y Museo Didáctico Antonini).
6 Ceremonias
y sacrificios entre monolitos
Es sin duda
uno de los yacimientos prehistóricos más relevantes. El venerable anillo de
piedras monolíticas de Stonhenge lleva 5000 años atrayendo a peregrinos, poetas
y filósofos. Se trata de un lugar místico y etéreo, un evocador eco del pasado
olvidado de Gran Bretaña, recordatorio de una civilización perdida que recorrió
las numerosas avenidas ceremoniales que surcaban la llanura de Salisbury.
Aunque son innumerables las teorías sobre su función (desde centro de sacrificio a reloj celestial), la verdad es que nadie sabe a ciencia cierta qué llevó a aquellas gentes a emplear tanto tiempo y esfuerzo en su construcción.
Aunque son innumerables las teorías sobre su función (desde centro de sacrificio a reloj celestial), la verdad es que nadie sabe a ciencia cierta qué llevó a aquellas gentes a emplear tanto tiempo y esfuerzo en su construcción.
7 El
misterio del solsticio de invierno
Desde la
superficie, Newgrange es solo un túmulo aplastado de unos 80 metros de diámetro
y 13 metros de alto. Pero dentro alberga uno de los yacimientos prehistóricos
más extraordinarios de Europa, de hacia el 3200 a.C. (unos seis siglos anterior
a las pirámides egipcias) la mayor tumba de corredor de la Edad de Piedra en
Irlanda. Está en el Condado de Meath, el llamado “Reino Medio”, al norte de
Dublín. El propósito del túmulo de Newgrange sigue siendo desconocido. Hay
quien apunta que podría ser un cementerio de reyes o un lugar para celebrar
rituales, pero el alineamiento con el sol durante el solsticio de invierno
sugiere una función de calendario. A las 8:20 en punto del solsticio de
invierno (19-23 de diciembre), los rayos del sol naciente iluminan la hendidura
que hay sobre la entrada, avanzan lentamente a través del largo pasillo e
inundan de luz la cámara funeraria durante 17 minutos.
8 La guarida
de los extraterrestres
En 1947, en un
rancho cercano a la población de Roswell, algo chocó contra la tierra. Nadie le
habría dado mayor importancia si los militares no hubieran puesto tanto empeño
en silenciar el hecho, lo que, para algunos, dejaba claro el asunto: los
extraterrestres habían llegado.
Desde
entonces, la curiosidad internacional y la ingenuidad local han transformado
Roswell en una guarida de extraterrestres. Unas bulbosas cabezas blancas
brillan sobre las farolas del centro, y en julio se celebra un festival
UFO con un desfile de disfraces de extraterrestres, discursos de invitados
y conciertos. También está el International UFO Museum y el Research Center, de
visita obligada para crédulos y coleccionistas de lo kitsch.
9 Nessie, un
monstruo muy familiar
En principio
es solo un lago grande cerca de la cabecera de las Highlands escocesas, pero,
en cuanto a historias y leyendas, podría tratarse de un océano. Como es bien
sabido, se cuenta que el Loch Ness es el hogar de un “monstruo”, conocido
cariñosamente como Nessie, una criatura con aspecto de dinosaurio que aparece
estelarmente de tarde en tarde. Las historias de una criatura del lago llevaban
siglos circulando, pero en 1934 la fotografía de un largo cuello y una cabeza
renovó el interés por Nessie. Desde entonces ya no ha decaído, y el lago no
deja de atraer a los visitantes de todo el mundo. Loch Ness se extiende entre
Inverness y Fort Augustus y el circuito completo alrededor del lago abarca unos
112 kilómetros.
10 De turismo
con los alienígenas
Imán para los
extraterrestres y sus cazadores, se supone que esta base militar, parte de la
Nellis Air Force Base, fue desde los cincuenta una zona de confinamiento para
los ovnis capturados, incluidos los alienígenas de Roswell. Tan extendida
estaba esta creencia que la carretera de acceso, la Highway 375 se conoce como
la Extraterrestrial Highway.
Sin embargo,a mediados de julio de 2013, la CIA, que siempre había negado su existencia, reconoció que la Área 51 no solo existe, sino que se creó en plena Guerra Fría para desarrollar aviones espía.
Sin embargo, la desclasificación de los documentos secretos de la central de inteligencia no han hecho desistir a los amantes del misterio.
Sin embargo,a mediados de julio de 2013, la CIA, que siempre había negado su existencia, reconoció que la Área 51 no solo existe, sino que se creó en plena Guerra Fría para desarrollar aviones espía.
Sin embargo, la desclasificación de los documentos secretos de la central de inteligencia no han hecho desistir a los amantes del misterio.
Si quereis saber más destinos extravagantes para vuestras vacaciones podeis informaros en la sección "El Viajero" del periódico "El País" de donde he obtenido toda la información del artículo.
Muy interesante.Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarQue comentario mas soso... -_-
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